Vino de La Mancha, Francia

Con todo el mundo y su gato paralizando el país con piquetes confesionales (pero sin malos rollos, que estos son “de los buenos”) es el momento de publicar por aquí alguna tontería. Como esta que me crucé en mi reciente viaje a Nueva York:

Como manchego, ya me dolió que me dieran de beber un vino de mi tierra “producido” en Francia. Siete euros los 20 centilitros. Y, además, malo. ¿O sería cosa del efecto “comida de avión” que nos desactiva las papilas gustativas? Qué más dará. Total, habiendo perdido ya la vergüenza…