El hammerspace (“espacio martillo”, literalmente) es el volumen interior de un contenedor, cuando es aparentemente más grande por dentro que por fuera. Mención aparte de los RPGs, suele asociarse a contextos mágicos, o aparece como broma sin una explicación mínimamente coherente. Ejemplos de lo primero serían Mary Poppins (y más específicamente su bolso) o Harry Potter (el callejón Diagon, toda una pequeña ciudad superpuesta a Londres). En lo segundo, Doctor Who (la TARDIS) o incluso Futurama (¿cómo es exactamente el interior del torso de Bender?).
Uno de los pocos autores de ciencia ficción seria que ha utilizado el concepto de hammerspace, dotándolo de una explicación (más o menos) racional, es Charles Stross. En Glasshouse, la tecnología de manipulación topológica del espaciotiempo ha avanzado tanto que incluso los bolsillos de las chaquetas incorporan puertas que dan acceso a zonas de almacenaje en cualquier lugar del Universo. Mucho antes, el maestro Heinlein utilizó hipercubos o tesseracts en algunas de sus historias, como —And He Built a Crooked House—. Un hipercubo es más grande por dentro que por fuera, o dicho de un modo más preciso, el volumen total del hipercubo desdoblado (su red) es mayor que el de cualquiera de sus proyecciones en el espacio tridimensional. Por cierto, en Madrid hay un hipercubo de verdad, o al menos su proyección 3D en mármol junto al Museo de Ciencias Naturales (el Monumento a la Constitución de 1978 —40°26’27” N 3°41’27” W). Es la prueba más palpable de que la Inmaculada Constitución es también más grande por dentro que por fuera, igual que en los dibujos animados.
Más información aquí: Cartoon Physics 101: What is Hammerspace?.